Escondida entre membrillos, esta casa combina sin esfuerzo ni pudor materiales existentes autóctonos con acabados y detalles actuales, dando un acertado aire luminoso y acogedor a una casa rústica. Muebles de diseño y objetos recuperados acaban de conformar unos interiores confortables pero con carácter al mismo tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario