Esta obra firmada por el estudio de arquitectura "BAK Arquitectos" está ubicada en algún lugar recondito de Argentina. A la hora de plantear el proyecto se tuvo en cuenta el entorno que lo rodeaba intentando minimizar la intervención en el paisaje. El resultado de ello fueron dos prismas paralelos y superpuestos
entre si, adaptandose al desnivel del terreno pudiendo aprovechar el mismo para construir un sótano. El acabado de las fachadas es de hormigón tanto en interior como en exterior, no necesitan mantenimiento alguno y su durabilidad es eterna al igual que para el suelo de hormigón pulido.
El aspecto podría haber sido el de una vivienda fria, sin armonia, pero es todo lo contrario, el buen hacer del grupo ha hecho de este proyecto una casa de cuento, que sin ir más lejos podría ser la de "Los tres cerditos", sólo que en vez de utilizar ladrillos el cerdito ha decidido usar hormigón, una decisión mucho más acertada para resguardarse del lobo.
Las grandes y diferentes tipos de ventanas inundan la casa de luz y conectan al inquilino con el paisaje, un paiseje tosco y arido con sus miles de pinos centenarios, pareciendo en algún momento que el interior se vuelve exterior dejando entrar a la vivienda a algún que otro pino, aunque más que una posible visión esto es una realidad, ya que se preservó un añoso y robusto pino que es abrazado por una de las fachadas. Parte del mobiliario es de obra, construido a base de hormigón, con bancadas enormes que recorren el perímetro interior de las paredes.
En definitiva, es una casa que nos encanta por el paisaje en el que se ubica y por su inefable aspecto naïf.
Una buena vivienda en un lugar espectacular.
ResponderEliminarSaludos y buen fin de semana!!!
Muchas gracias Daniel !
ResponderEliminarexpectacular!!!
ResponderEliminar